Capítulo 1

Ella caminaba hacia su casa. Mantenía la vista alta . Estaba muy nerviosa y creía que se le reflejaba en la cara. Así que decidió no pensar más en el tema y caminaba con paso erguido.

Al llegar a la casa contuvo la respiración unos segundos y pensó: ¿Qué ocurrirá?.

Tocó el timbre y comenzó a respirar.

Al verlo en la puerta con su mirada oscura y haciendo una mueca, hizo que tuviera un escalofrío.

Sonrió.

   -Hola. ¿no se me hizo tarde, no?

   -Nop. Pasa.

Pasó y esperó que él cerrara la puerta. Lo siguió hasta la sala, donde la TV estaba prendida.

   -Mira lo que quieras. Voy a traer algo, no demoro.

él salió de ahí y ella cogió el control. Comenzó a cambiar rápidamente los canales, pero sabía que no buscaba nada, solo pensaba en lo miedosa que estaba y en lo vulnerable que la hacia sentir.

   -¿No piensas ver nada?- se sentó a su lado y rápidamente se puso en alerta.

   -No hay nada que ver- seguía cambiando los canales.

   -A ver si yo encuentro algo. Dame el control.-vio como estiraba su mano hacia ella.

Lo miró y luego miró su mano. Le dio el control. Él sonrió y puso un canal de deporte.

Ella se recostó en el mueble y suspiró.

   -¿Esto es lo que veremos?

   -Sí, a menos que sepas de algún programa bueno cuando pasabas rápidamente.

Suspiró de nuevo.

    -Bueno.

Cogió su celular y comenzó a jugar. Se había concentrado mucho cuando se dio cuenta que él miraba su juego. Se puso muy roja y su celular cayó.

   -¿Qué pasó?- La miraba y recogió su celular.

   -Me has desconcentrado- comenzó a jugar con su pelo.

   -No es para tanto- Le devolvió el celular.- Estoy aburrido. Hay que hacer algo.

   -¿Cómo qué?- Ella lo miró.

   -No sé. Algo divertido.

De pronto, él comenzó a acercársele. Ella retrocedió un poco y luego sonrió.

   -Oye. Podemos seguir viendo TV.

   -No, ya no quiero.

Se paró y comenzó a caminar por la casa.

   -Entonces vamos a caminar por ahí.

Él la miraba desde el sillón, frotó sus ojos y se paró.

   -Hace frío. No me provoca salir.

   -Bueno, la caminata nos calentará.

   -Hay más cosas que nos puede calentar.

   -¿cómo qué?

   -No sé, puedo secuestrarte.- y sonrió. Se le veía reflejada la idea en los ojos.

   -Oh, tu no harás eso- dijo nerviosamente.

   -Claro que sí, es divertido.

Se acercó a ella y la miraba a sus ojos. Ella reaccionó y lo golpeó en su tobillo, haciendo que él grite.

Aprovechó para irse por el pasadizo.

    -Lo siento, no quise patearte- gritaba.
    -¿Dónde estás?- Ella oyó como decía las palabras con dolor.
    -Vamos. Sabes que no te haré daño. Al escaparte de mi lo haces mas divertido.

Ella vio como se acercaba la sombra por el pasadizo.
Sintió más escalofríos y notó como rozaba la blusa rosa de botones con sus pechos: Mal día para no llevar bra.
Vio que la sombra se detuvo y comenzaba a desaparecer de a pocos.
Ella se acercó de nuevo para saber si él estaba bien.

   -Te dije que sería divertido- La cogió por atrás y él la empujó al sillón, cayendo boca abajo.

Ella sintió como se ponía encima de su cuerpo y jalaba su pelo.
Gimió muy bajo.

   -Creo que ya estuvo bien este juego. Hay que parar.
   -Oh no niña, ésto recién comienza.

Comenzó a besar su cuello muy lento mientras seguía jalando su pelo.
De pronto la volteó mirándola fijamente.

   -¿Sabes que te has portado mal, no?
   -Yo... solo me defendí.
   -No parecía eso.

El cogió las solapas de su blusa y tiro de ellas fuertemente. Los botones saltaron y el comenzó a quedarse quieto.

   -Que atrevida, estás sin bra.

Ella comenzó a respirar agitadamente y él las tocaba suavemente con uno de sus dedos.
Tocó sus pezones que reaccionaron rápidamente. Ella comenzó a moverse debajo de él.
Se acercó y comenzó a besar su pecho y los mordisqueaba un poco.
Ella empezó a respirar entrecortadamente. Él comenzó a desabrochar su jean...

    -Lucía. Despierta. Ya es tarde.
    -Mmmm...
    -Vamos. Llegaremos tarde-sintió que le quitaban las sábanas.

¡Rayos!-pensó-en lo mejor del sueño.